Raza

El Pomerania, también conocido como Spitz enano alemán, tiene sus raíces en la región de Pomerania, entre Alemania y Polonia, donde originalmente eran perros de trabajo de mayor tamaño. Con el tiempo, fueron criados para obtener un tamaño más pequeño y se convirtieron en populares perros de compañía. Su gran popularidad creció aún más en el siglo XIX, cuando la reina Victoria de Inglaterra tuvo un Pomerania, lo que consolidó su fama en las cortes europeas.

El Pomerania es conocido por su energía, valentía y vivacidad. A pesar de su pequeño tamaño, es un perro seguro de sí mismo, lo que lo convierte en una mascota excelente para familias que buscan un compañero divertido y lleno de personalidad. Su carácter extrovertido lo hace adaptable a diversos entornos.

Tamaño pequeño, mide entre 18 y 30 cm a la cruz y pesa entre 1.5 y 4 kg. Es una de las razas más pequeñas del grupo Spitz.

Pelaje Abundante: Tiene un pelaje doble, con una capa externa larga y erguida y una capa interna más corta y densa. El pelaje es esponjoso y requiere cepillados regulares para evitar enredos.
El pelaje puede presentar una amplia gama de colores, incluidos naranja, blanco, negro, crema, chocolate, y más. Los colores pueden ser sólidos, bicolores o tricolores.

Cabeza en Forma de Oso: Su cabeza es redonda con orejas erguidas y un hocico corto. Los ojos son oscuros y de forma almendrada, lo que le da una expresión vivaz.

Temperamento alegre y vivaz: Es conocido por su personalidad extrovertida, juguetona y enérgica. A pesar de su tamaño pequeño, tiene una gran personalidad y suele ser valiente.
El Pomerania es una raza que combina belleza, personalidad y energía, haciendo de él un compañero encantador y dinámico.

Es una raza muy inteligente y aprende rápidamente, aunque puede ser algo obstinado. Responde bien al refuerzo positivo y al entrenamiento consistente.

Necesita ejercicio regular para mantener su bienestar, como caminatas diarias y tiempo de juego. Su naturaleza activa requiere estimulación mental y física.

Se adapta bien a vivir en apartamentos y espacios pequeños, pero requiere socialización y ejercicio para evitar problemas de comportamiento.

Tiene una esperanza de vida de entre 12 y 16 años, con cuidados adecuados y una dieta saludable.

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